Micah Parsons fue traspasado de Cowboys a Green Bay, donde firmó una extensión de contrato récord para un jugador no Quarterback
En un movimiento que ha sacudido a la NFL, los Dallas Cowboys canjearon este jueves 28 de agosto a su superestrella, el Defensive End Micah Parsons, a los Green Bay Packers. A cambio de su jugador cuatro veces Pro Bowl, los Cowboys recibieron al Defensive Tackle Kenny Clark y dos futuras selecciones de primera ronda del draft (2026 y 2027). Inmediatamente después del canje, Parsons acordó una histórica extensión de contrato con su nuevo equipo, poniendo fin a una relación con Dallas que parecía destinada a durar toda su carrera.
La magnitud del traspaso se vio reflejada en el contrato que los Packers le otorgaron a Parsons: un acuerdo récord de cuatro años y 188 millones de dólares, el más grande en la historia de la NFL para un jugador que no es Quarterback. El acuerdo incluye 120 millones de dólares totalmente garantizados y un pago de 62 millones en su primer año, una inversión masiva que demuestra la intención de Green Bay de construir su defensiva alrededor del talentoso “cazamariscales”.
La salida de Parsons de Dallas no estuvo exenta de drama. En un comunicado en redes sociales, el jugador expresó su sentir agridulce. “Yo nunca quise que este capítulo acabara, pero no todo estaba en mi control”, escribió, insinuando una ruptura en las negociaciones. “Solo pedía que la persona en la que yo confiaba para negociar mi contrato fuera parte del proceso”. Estas palabras sugieren que el traspaso fue el resultado de un desencuentro con la directiva de los Cowboys.
Para los Green Bay Packers, la llegada de Parsons transforma por completo su unidad defensiva. El equipo no ha tenido un jugador con capturas de dos dígitos desde 2020, mientras que Parsons nunca ha registrado menos de 12 en ninguna de sus cuatro temporadas como profesional. Su capacidad para presionar al Quarterback rival es una pieza de élite que Green Bay no poseía, elevando instantáneamente el potencial de su defensiva a un nivel de contendiente al campeonato.
El canje no solo reconfigura el balance de poder en la Conferencia Nacional, sino que también añade una dosis extra de morbo al calendario de la temporada. El regreso de Micah Parsons a Dallas se producirá de manera casi inmediata, ya que los Packers visitarán a los Cowboys en la Semana 4, el próximo 28 de septiembre, en un partido programado como el estelar de Sunday Night. Todas las miradas estarán puestas en ese encuentro para presenciar el primer capítulo de esta nueva e inesperada rivalidad.