La cancha del Estadio BBVA se ha convertido, históricamente, en un auténtico dolor de cabeza para los Pumas. Desde su inauguración en 2015, el moderno recinto de los Rayados de Monterrey ha sido testigo de una constante: la incapacidad del conjunto universitario para llevarse los tres puntos.
Ahora, el destino ha querido que estos dos equipos se vuelvan a encontrar en este escenario, pero con un ingrediente adicional de alta tensión: un lugar en la Liguilla a través del Play-In.
La estadística habla por sí sola. En sus visitas al “Gigante de Acero”, los Pumas han cosechado una serie de 11 derrotas y un empate, lo que alimenta la narrativa de dominio regiomontano. Esta racha adversa no solo pesa en el historial, sino que también genera una sombra psicológica en el entorno auriazul.
Para este crucial encuentro de Play-In, la historia se erige como un rival más para los dirigidos de Efraín Juárez, ya que necesitarán una victoria durante los 90 minutos para avanzar a la Liguilla. No obstante, un empate podría beneficiar a los universitarios para llevar el duelo hasta la tanda de los penales.
Ambos equipos se enfrentarán este domingo cuatro de mayo, y el equipo vencedor será el que avance a la Liguilla para enfrentar al Toluca en los cuartos de final.