Guadalajara da un golpe de autoridad en su casa, y se lleva la mínima ventaja ante unos Pumas que pudieron salir goleados del Akron, pero que gracias a Julio González, llegarán a su casa con la obligación de ganar por lo menos por una anotación.
El partido comenzó con retraso debido al tráfico en Guadalajara. Ambas escuadras llegaron con retraso al recinto, por lo que se debió posponer unos minutos el inicio del partido para permitir en la mejor manera el calentamiento y la preparación de los equipos.
Los primeros 20 minutos fueron intermitentes, al inicio, las chivas rayadas del Guadalajara quisieron hacerse con el control del balón y metieron algunos centros que Gonzáles tuvo que rechazar, mientras que los felinos esperaron el contragolpe. Sin embargo, conforme avanzó el tiempo, los papeles se invirtieron.
Aún así, el Guadalajara por poco rompe el cero; el oso González se quedó con el tercer remate en el área y sacó un riflazo que fue bien rechazado por el arquero felino. Con base en reflejo puro, el guardameta se lanzó a su costado para negarle la ventaja a los locales.
A cinco minutos de terminar la primera parte, Erick Gutiérrez mandó un balón por sobre el medio campo para que Roberto Alvarado estuviera cara a cara con González; un toque sutil del atacante fue bajando dramáticamente hasta que se estrelló en el travesaño, aunque el portero parecía llegar en urgencia.
Pero las Chivas estaban cerca, y solo dos minutos después el nene Beltrán se animó desde fuera del área y con un verdadero cañonazo, perforó la portería de un González que parecía invencible hasta el momento.
La ventaja pudo ser mayor, un error en defensiva dejó a Marín de frente y franco ante el guardameta del Pedral, pero este último respondió y atajó lo que parecía un cantado 2-0 antes de los 15 de descanso;, aún así, si el atacante tocaba al centro del área, Alvarado tenía la portería sin guardián.
Al inicio del segundo tiempo, los Pumas comenzaron a adelantar líneas, lo que fue muy bien aprovechado por Guadalajara. Primero Gutiérrez disparó de primera intención y, a pesar de la larga distancia, su disparó fue bajando hasta terminar en el travesaño.
Segundos después, el propio Erick remató apenas afuera del área chica y parecía confirmarse el tanto mexicano, pero esta vez Julio González respondió y evitó la caída de su marco por segunda vez en la noche. Si Pumas no perdía por más goles, era gracias a su guardameta.
Después de una serie de rebotes en el área, el Toto Salvio tuvo en sus botines el empate para los universitarios, sin embargo su remate se fue por el costado de la portería de un Wacho Gutiérrez que hasta el momento, era un espectador más.
Pero a quince minutos del final, un tiro de esquina resultó con una mano en el área de Marín, la jugada no fue revisada por el VAR, pero no fue sancionada como penal. Lo que pudo jugar a su favor, fue que no estaba viendo el esférico cuando éste venía en camino.
Alexis Vega pudo volverse a ganar el cariño del público; después de un buen contragolpe de Guadalajara, el 10 del rebaño se animó desde fuera del área y disparó, sin embargo su tiro pasó rozando el poste.
Al final, el marcador pareció no darle justicia al rebaño sagrado, que ahora llegará al Estadio Olímpico Universitario con la encomienda de no perder, si es que desea avanzar a las semifinales del torneo. El juego de vuelta está programado para las 18:00 horas, tiempo del centro de México.