Argentina firmó una actuación soñada en el Mundial sub-17, y se impuso 3-0 a Brasil con hat-trick de Echeverri y avanzó a la semifinal del torneo. Está es la primera vez que la albiceleste se impone a los verde amarilla en la justa mundialista de esta categoría.
El encuentro tenía mucha expectativa, por los rivales, la instancia y el torneo, Argentina, consciente de ello, trató de dominar de principio a fin, y gracias a su juego colectivo logró acaparar los reflectores.
Aún así, Brasil tuvo la primera oportunidad al arco, un despeje de la saga terminó en los botines de Estevao, que entró al área y disparó, sin embargo la pelota se fue abriendo y no generó gran peligro.
Minutos después, Dudu se encontró con el balón fuera del área, y con un potente trallazo atacó la meta albiceleste, pero su intento pasó apenas desviado, y sólo quedó en un aviso más.
Pero este era el partido de Echeverri, y antes de los 20 minutos probó desde larga distancia; una bala salió de su botín y atravesó la barrera, sin embargo el balón pasó rozando el poste.
Un buen pase filtrado dejó a Estevao solo frente al portero, mismo que pudo significar el 1-0, pero el delantero se abrió demasiado y su disparo no tuvo dirección de portería.
Pero la ley no escrita de gol fallado, gol en contra se hizo presente; Argentina encontró la ventaja en un contragolpe, la joya de River Plate comandó a los suyos, se quitó una marca y disparó, la fortuna le sonrió y el desvío de la saga le ayudó para marcar el 1-0.
La verde amárela tuvo para empatar el encuentro, pero el disparo de Ryan salió con poca fuerza y Florentín no tuvo mayor problema para quedarse con la esférica.
La segunda mitad significó la oportunidad de aumentar la ventaja para Argentina, y Echeverri siguió empujando. El delantero dejó atrás a dos defensores y, cuando parecía que no tenía ángulo, le pegó a un balón que golpeó las redes y marcó el 2-0.
A los 70 minutos, Echeverri terminó de firmar su gran actuación; Agustín Ruberto le filtró un balón que lo dejó solo frente al portero, mismo que lo dejó tendido en la cancha y, ya con la puerta abierta, dio un pase a la red para poner el 3-0 definitivo.
Brasil intentó acercarse en el marcador, pero sus disparos terminaron por ir sin fuerza, dejándole un regalo a Florentín. El partido finalizó y nada ni nadie pudo evitar el destino del jogo bonito en el Mundial.
El próximo rival de los dirigidos por Diego Placente será Alemania, en lo que será la búsqueda de seguir marcando historia, ya que nunca han logrado clasificar a la final de la Copa del Mundo sub-17.