Baker Mayfield y los Buccaneers dominaron a los Eagles y avanzan a la ronda divisional
El último partido del Super Wild Card Weekend de la NFL nos trajo el enfrentamiento entre los Tampa Bay Buccaneers y los Philadelphia Eagles. Los equipos llegaban con tendencias contrarias, mientras Philadelphia había perdido 5 de sus últimos 6 partidos, Tampa Bay había ganado 5 de sus últimos 6. Y, para sorpresa de muy pocos, los Buccaneers arrasaron a los Eagles desde la primera serie ofensiva, llevándose la victoria y asegurando su pase a la ronda divisional.
Los Tampa Bay Buccaneers llegaron como el claro favorito para ganar el encuentro; sin embargo, en el último par de partidos habían sufrido problemas a la ofensiva, incluyendo lesiones. No obstante, Baker Mayfield y sus compañeros salieron a demostrar un gran nivel. Mayfield completó el 61% de sus pases (algunos drops de los WRs), para 337 yardas y 3 touchdowns. Asimismo, Rachad Rise (RB) corrió para 72 yardas en 14 acarreos. Además, la defensiva logró limitar a los Eagles a tan solo 9 pts.
Por el contrario, los Philadelphia Eagles tan solo terminaron por confirmar lo que era evidente, su grave desgaste físico. Tanto la ofensiva como la defensiva se vieron apagadas y a un nivel muy bajo. Jalen Hurts completó el 71% de sus pases, para 250 yardas y solo 1 touchdown. Además, D’Andre Swift se vio limitado a tan solo 34 yardas por tierra, una cantidad paupérrima. El único jugador que lució del equipo fue DeVonta Smith, quien sumó 148 yardas por recepción.
Con este resultado los Buccaneers avanzan a la ronda divisional de los play offs, teniendo que viajar a Detroit para enfrentar a los Lions en el Ford Field Stadium, en búsqueda de llegar a la final de la NFC. Mientras tanto, los Eagles despiden, con amargura, lo que parecía una temporada de ensueño, teniendo por delante un complicado periodo de offseason.